lunes, 20 de febrero de 2012

LA COCINA DE VIGILIA

Las costumbres que la Iglesia dictaba cuando los curas vestían de cura y los guardias civiles tricornios, decían que en la mayoría de las casas y en los restaurantes durante toda la cuaresma, los viernes se preparaban unos potajes de vigilia que no se los saltaba un gitano y que todos devoraban devotamente.
Y es que hay unos guisos de determinadas épocas del año que están marcadas por un pasado en el que la religión, las posibilidades económicas y la creatividad popular han jugado un papel determinante en su elaboración. Por ello dejando de lado prejuicios anticlericales que nada tienen que ver con la gastronomía, se puede aprovechar esta época del año para conocer unos platos de vigilia, entre los cuales el potaje es una apuesta segura. Aunque pueden ser consumidos durante todo el invierno, estos potajes alcanzan su máximo esplendor en la Cuaresma y en Semana Santa, siendo el Potaje de vigilia y el Recao junto con el bacalao desalado en sus múltiples variedades culinarias, ejemplos de estos platos.
Por ello la POSADA DEL ABADIADO, desde el próximo fin de semana y hasta la Semana Santa vamos a ofrecer nuestros menús basados en lo que vamos a denominar la que llamaremos Cocina de Vigilia.

Elaboracion del RECAO
POTAJE DE VIGILIA

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